Del mar, ¿no lo recuerdas?,
nos viene a veces ese terror de vivir.
Saint-John Perse
Por la ventana la costa se oscurece, sus espejos ya no te reflejan. Con un terror silencioso, las máscaras y los signos de la noche son huecos en la arena de la infancia. Las olas y los años te hunden y te borran en un absurdo destino, en la visita de memoria y muertos. Palabras que el tiempo entrega derrotadas a una pasión solitaria.
Agosto, 2001
nos viene a veces ese terror de vivir.
Saint-John Perse
Por la ventana la costa se oscurece, sus espejos ya no te reflejan. Con un terror silencioso, las máscaras y los signos de la noche son huecos en la arena de la infancia. Las olas y los años te hunden y te borran en un absurdo destino, en la visita de memoria y muertos. Palabras que el tiempo entrega derrotadas a una pasión solitaria.
Agosto, 2001